Inseminación Artificial IA
IA
¿En qué consiste?
La inseminación artificial es un tratamiento de reproducción asistida para conseguir el embarazo, totalmente indolora y completamente ambulatoria, que no afectará para nada tu vida cotidiana.
Consiste en introducir los espermatozoides en el útero de la mujer, ya sea de la pareja o de un donante. Su eficacia radica en seleccionar únicamente los espermatozoides móviles capaces de fecundar el óvulo, y así conseguir el embarazo de una manera más natural.
¡Aumentando así las probabilidades de embarazo!
Tipos de fecundación IA
(IAH) o conyugal (IAC), es decir, que se utiliza muestra de la pareja. La probabilidad de embarazo en este caso es cercana al 15-25%.
o de donante (IAD), con esperma de banco. La tasa de éxito es del 20-30%.
Proceso en IA
Cada caso es diferente por eso de acuerdo al diagnistico de cada paciente se diseña una estrategia de ciclo personalizada
Estimulación ovárica
Se administran dosis bajas de hormonas para estimular ligeramente la producción ovárica, evaluando el desarrollo folicular.
Inducción de la ovulación
Cuando en un control ecográfico se observa que uno o dos folículos ováricos tienen el desarrollo óptimo, se desencadena la ovulación. Para ello, la paciente se administrará la inyección de hormona hCG y se programará la inseminación a las 36 horas aproximadamente.
Capacitación del semen
Es el proceso de preparación de la muestra de semen para que ésta esté concentrada en espermatozoides móviles y no contenga otros tipos celulares ni plasma seminal.
Inseminación
En el momento de la ovulación, se deposita una pequeña muestra de semen (0.5 ml normalmente) en el útero de la mujer a través de una cánula. No se requiere anestesia y se lleva a cabo en la propia consulta.
Apoyo de fase lútea
Se administra progesterona vía oral o vaginal para facilitar la implantación del embrión en el endometrio y, por tanto, la consecución del embarazo.
Ventajas de la Inseminación Artificial
Tratamiento sencillo, pues no requiere intervención quirúrgica, como ocurre en el caso de la FIV. Además, el procedimiento no duele ni causa molestias.
Costo más bajo a comparación de otros tratamientos.
Antes de proceder con una inseminación artificial (IA) con el objetivo de lograr un embarazo, es fundamental que tanto la mujer como el hombre (en caso de que exista una pareja masculina) cumplan una serie de requisitos o criterios previos:
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Permeabilidad de las trompas de Falopio.
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Buena reserva ovárica.
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Edad de la mujer inferior a 36 años.
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Buena calidad seminal.
Si no se cumplen los requisitos necesarios, otras técnicas como la FIV pueden ser aplicadas directamente.